"¿Sexo Cósmico?"
La historia del nacimiento de los Nephilim o Gigantes que nos muestra tanto la Biblia como el Libro de Enoc, es una de las narraciones que nos brindan pruebas más obvias sobre la modificación genética humana en la antiguedad.
Génesis 6:1.
- Viendo los hijos de Dios (E.T.) que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre ellas a volunad. Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne.
Génesis 6:4.
- Los gigantes aparecieron en la tierra cuando los hijos de Dios se unieron con las hijas de los hombres para tener hijos con ellas, y también después. Ellos fueron los famosos héroes de los tiempos antiguos (...) El Señor vio que era demasiada la maldad del hombre en la tierra (...) dijo: Voy a borrar de la tierra al hombre que he creado, y también a todos los animales domésticos (...) Yo voy a mandar un diluvio que inundará la tierra y destruirá todo.
"Y concibieron a las hijas de los hombres..."
Parece que el relato Bíblico y el Libro de Enoc recogen los mismos datos, ya que el “Libro de Enoch” nos relata:
- Los mensajeros, hijos de los cielos, se dijeron entre ellos: "Vamos, escojamos mujeres entre los hijos de los hombres y engendremos hijos." De estas uniones concibieron y pusieron en el mundo grandes gigantes.
- Elohím les permitió descender, pero enseguida a los ángeles les venció la lujuria por las hijas de Adán y se corrompieron mediante el trato sexual. (...)antes del fin disfrutaban indistintamente con vírgenes, matronas, hombres y bestias(...) Shemhazai engendró dos hijos monstruosos llamados Hiwa e Hiya.
-En consecuencia, los Elohím les advirtieron que liberarían las Aguas de Arriba y así destruirían a todos los hombres y todas las bestias.
- Los ángeles adoptaron forma humana con la esperanza de enseñar rectitud a la humanidad. Pero esa asunción de carne humana les hizo someterse a los apetitos humanos: seducidos por las hijas de los hombres, se encontraron encadenados a la Tierra y fueron incapaces de recuperar sus formas.
-Los Caídos tenían unos apetitos tan grandes que Yahvéh hizo llover sobre ellos maná de muchos sabores diferentes (...) los Caídos rechazaron el maná de Yahvéh, mataron animales para comerlos y hasta probaron carne humana, contaminando así el aire con vapores nauseabundos (...) procrearon hijos monstruosos y titanes. Fue entonces cuando Yahvéh Elohím empezó a pergeñar la destrucción del mundo por medio del diluvio.
Vayamos por partes. En primer lugar, sea como fuere, los varones de estos coitos cósmicos son de origen extraterrestre, mientras que las hembras que dan a luz a los gigantes, son humanas, terrestres, lo que nos lleva intuir que estas fueran violadas. En cualquier caso, el resultado de estos coitos fue engendrar gigantes monstruosos con apetitos tanto carnívoros como canívales, dejando patente la variación genética.
Por otro lado, la veracidad de este relato justificaría la aparición de restos óseos de supuestos gigantes, citada en numerosas ocasiones por distintos cronistas a lo largo de la historia, así como la mitología griega cuenta que los gigantes fueron hijos de Titán, los españoles a su llegada a las Américas también pudieron escuchar (y en algunas ocasiones ver) de boca de los ancianos del lugar como sus antepasados compartieron aquellas tierras con una raza de gigantes a los que exterminaron en sangrientas luchas. Del mismo modo les mostraron sus antiguas ciudades y monumentos, y también algunas de sus tumbas. Fray Diego Durán afirmó en sus escritos ser testigo de la presencia en estas tumbas de huesos aparentemente humanos pero de enormes proporciones.
Son numerosos los museos en diferentes partes del mundo que aseguran poseer huesos de los míticos gigantes que según todas las tradiciones habitaron la Tierra en tiempos remotos.
David y el Gigante Goliath
Según la Biblia los gigantes fueron una de las causas principales por las que "Dios" envió el Diluvio Universal sobre la Tierra. Se supone que no todos fueron exterminados en este diluvio. Aunque parece ser que al igual que algunos humanos, no todos los gigantes perecieron, tal como se puede comprobar en hechos bíblicos posteriores al relato del diluvio, como sería el caso del famoso enfrentamiento de David contra el gigante Goliath. Aunque probablemente el diluvio marcó un antes y un después en la existencia de estos seres, iniciando su declive en todos los pueblos antiguos.